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Mostrando entradas de noviembre, 2011

mi ex jefa

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Soñé con mi ex jefa. Mi vida parece componerse de jefes. Ella me llamaba desesperada por que su empresa se iba a pique. No daba pie con bola con los diseños y necesitaba urgente apuntalamiento. Cuando yo entraba todo, ahora, estaba resumido en un primer piso. Era un pasillo ancho y largo. Al principio de todo había una mesa redonda con Alice contando botones ,que, cuando me veía entrar,ponía esa sonrisita irónica que enrealidad oculta un gran resentimiento. Yo me sentaba con ella en la mesa y como no me daban nada para hacer me impacientaba y me levantaba gritando : "Bueno, a ver a ver!!, acá hay que reestructurar toda la colección,, vamos, vamos por dónde empiezo?" Mi jefa me odiaba con toda su alma pero me necesitaba, y se ve que había transmitido ese odio a todos que me miraban con recelo. "Bueno , vamos ¿qué hago?, ¿qué necesitás?" preguntaba yo impaciente y llena de adrenalina, enfrentando el miedo poniendo el pecho,pero el ambiente era tan malo y tan lle

el jefe

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Ojos azules se ve que nos tenía en una lista de mails viejos y no nos borró y hacía una fiesta y nos mandó mails a Caro y a mí que obviamente nos alistamos para ir.La fiesta se llamaba "Remember the 90" o algo así y era ultrasecreta. Es que Ojos azules y su esbelta y flamante mujer llena de ropa diseñada por sus esclavos querían festejar recordando (palabras de ellos) "aquella década dorada, llena de champagne y dólares y olvidar un poco ésta miseria de ser todos iguales ". Además ella en la PD ponía : "festejaremos la idea de tomar empleados jóvenes y sepultar a los de 40 que andan pululando pidiendo trabajo y que se den cuenta que a los 40 la vida ya fue".  Con Caro nos dimos cuenta que buscar trabajo ahí no era posible, pero nos pusimos a revolver nuestros placares llenos de abrigos de leopardo de aquellas épocas y tacos dorados y nos fuimos a la peluquería a hacernos en nuestros cabellos las típicas rayas negras y rubias de aquella época, bien desde

reunión de consorcio dos

En la reunión de consorcio tuve la pésima idea de contar que había sido diseñadora de indumentaria (cuando trabajé con Alice en aquellos tiempos) y se ve que hay gente que hace síntesis de una manera muy curiosa y espeluznante. A los tres días de sucedido ese acontecimiento un vecino que siempre intenta saludar con un beso y al que yo esquivo fríamente, tocó el timbre de mi casa. Creí que era la administradora que venía a cobrar las expensas y abrí, encontrándome con ésta persona que traía en sus manos tres pantalones para que les cosiera los botones. Asoció "diseñadora de indumentaria" con "cose botones" y ,aún peor, se sintió con confianza como para creer que yo tenía tiempo en mi vida para ocuparme gratis de sus pantalones. Además qué tiene que ver diseñadora con el oficio de coser?!!! Lamentable, pero aún peor es que no sé decir que no y le hice el favor del cual estoy profundamente arrepentida. Una amiga me contó que le había pasado algo similar, había dicho

"te tengo que querer por que sos la novia de mi hijo"

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Cacho me vino a buscar después de décadas de no vernos, me dijo que quería volver y le dije que no creía, entonces me rogó que lo acompañara a almorzar con la madre por que sólo se quedaba dormido. Cuando nos abrió la puerta la mujer se sorprendió de verme y su sonrisa de alegría se transformó en una trompa arrugada. Nos sirvió pastas mientras no volaba una mosca ni había un mínimo intercambio de palabras. Cuando por fin se sentó nos contó la historia de una ex amiga que tenía en su juventud que era "muy mala persona" y "justamente se llamaba Lola" (recalcó mirándome fijo). "A veces uno tiene que querer a alguna gente" continuó, "yo te tengo que querer si sos nuevamente la novia de mi hijo". Cacho y yo nos miramos con signos de interrogación en nuestros ojos. "Y Amalia era tan buena..." decía su madre mirando la foto de una chica que tenía en su aparador, "era tan para vos Cachito, no sé por qué no la elegiste...". En ese mi